febrero 21, 2008

Confesiones de una Medusa de Mar Culposa







Mi presencia en algunas costas se ha convertido en un hecho frecuente, sobre todo en tiempos de soledades y ataques de pánico, esos temporales me acercan hasta la orilla, soy un fenómeno natural que no puede ser detenido, ya que no depende de mi voluntad ni de la de ningún hombre.

Te aseguro que no ataco por placer, tengo unas células urticantes, conteniendo en su interior un veneno y cuando lo suelto, es para cazar o para defenderme de algún peligro real o imaginario.

Por norma general, mis picaduras no suelen ser graves, aunque siempre hay excepciones.

Si hay algo que caracteriza a esas picaduras es la molestia y el ardor que representan.

Síntomas de la picadura de medusa:

Los síntomas comunes a las picaduras de medusas sin contar con que la víctima sea alérgica o tenga algún tipo de enfermedad que haga variar estos, son:

Dolor, emocional y físico
Ardor, emocional y físico
Inflamación, de la parte afectada y sobre todo del lado izquierdo del cuerpo
Enrojecimiento, principalmente del alma
Sangrado, solo en casos extremos y principalmente en la cordura

Primeros Auxilios ante una picadura de medusa:

Cuando una medusa te ha picado, el dolor y picor es inmediato, lo primero que hay que hacer es limpiar la zona afectada por la picadura, si es posible con caricias autoaplicadas.


Nunca deberemos usar agua dulce, ya que aunque parezca increíble, hay aguas dulces muy embusteras que rompen las células urticantes y puedes sufrir otra picadura.


Para limpiar la zona, el suero fisiológico es perfecto y también la saliva de algunos bellos recuerdos.


En caso de no haber, el agua salada también podrá ser una solución, principalmente la que sale de los ojos o de las nubes de otoño.


Durante 15 minutos aproximadamente deberás aplicar frío y resguardo a la zona afectada, no aplicar el hielo directamente sobre la picadura, sino cubierto con algún paño o toalla, si se tiene la posibilidad de recurrir a la mirada de algún oso polar o pingüino, esto será de mucho alivio.


Si hay algún resto de tentáculo adherido a tu piel, debes quitarlo, pero nunca con las manos. Utiliza unas pinzas. Y si esto sucede toma en cuenta que te has quedado con una parte de mí y que eso para mí tampoco es fácil.


También se administrará un antihistamínico, para la reacción y un analgésico para el dolor.


Si el dolor es muy intenso o el estado de la víctima empeora, deberá acudir a un refugio de inmediato.


No hay que frotarse ni con toallas, ni con arena, ni con sirenas, ni con nada que pueda lastimarte más.


Y sobre todo, es cuestión de tiempo, pues de verdad que todo lo cura, todo pasa.









Imagen: Danapra




boomp3.com

6 comentarios:

Pau Llanes dijo...

Ay, mi Samantha... qué sorpresa verte-travestida en medusa... pero no, que tú no picas, que sólo acaricias con tus palabras... Gracias por tu comentarios recientes... beso... que no pincha...pau...

Pau Llanes dijo...

Me paseo por tus sueños a ver si me dejas algo que llevarme a los ojos... besos... pau

Samantha dijo...

Hola Pau¡¡¡¡ Mmmm, me desconcierta un poco que hayas creído que yo no pico y la verdad es que sí lo hago, incluso puedo llegar a morder, y es que después de todo he llegado a tomar la desición de Nunca Más volver a negar mi sombra, por el contrario la estoy empezando a asumir con bastante orgullo. Sí, si pico y saco veneno y lo haré cada vez que lo considere necesario, jejeje.

Gracias por traer a este espacio tus ojos, es un placer saber que mis aportan algo a tus pupilas.

Saludos cálidos y sin veneno ni picaduras:)

Pau Llanes dijo...

Gracias por tu comentario, samantha... te leo en otro ratito... Ah... y en cuanto a tus deliciosas y picaronas amenazas de pico y veneno... pues... pues... pues... (a veces uno se queda sin palabras y dibuja una sonrisa que lo dice todo)... me voy a casita, que está lejos... besos... pau...

BELMAR dijo...

;)

BELMAR dijo...

;)