junio 06, 2008

La mujer que se rompió para encontrarse...





“Hay en las cosas que se rompen
algo como un deseo
de escaparse de sí mismas
para luego buscarse
en otros sitios”

Gabriela Aguirre Sánchez






Se internó en la profundidad de un bosque, los árboles tenían una espesura tal que difícilmente lograba penetrar la luz de la luna, no tenía miedo, esta no era la primera vez. Continuó caminando hasta que sus piernas, con agudas punzadas le recordaron la sensación de cansancio, esto la reconfortó bastante, su objetivo de alguna manera se estaba logrando, así que encontró debajo de un árbol enorme el lugar perfecto para descansar.

Se quedó dormida y soñó: una sombra de largas uñas se recostaba a su lado y rasgaba su vestido suavemente mientras emitía un sonido extraño, algo como el ronronear de un gato maduro. De repente comenzó a sentir miedo, tanto que trató de moverse para despertar y huir, pero el ronroneo se fue convirtiendo extrañamente en un aullido, el aullido de un hombre lobo. Despertó precipitadamente, su corazón saltaba con tanta fuerza que podía escuchar sus propios latidos, sin embargo, un efímero alivio la reconfortó, pues tan solo había sido una pesadilla, pero, al cabo de un lapso de silencio, lo volvió a escuchar; entonces entendió, lo había encontrado, era el momento de encarar los resultados de su búsqueda.

Se quedó quieta, tratando de relajarse y controlar el temblor que dominaba todos sus músculos, sabía que no había marcha atrás, además los aullidos, que cada vez se intensificaban más, la fueron atrayendo de una manera que difícilmente podía eludir. Se fue dejando llevar hipnotizada hasta encontrarlo, él estaba ahí y le aullaba a la luna de una manera tan lastimera que, sin darse cuenta comenzó a llorar. Sentía su rostro empapado y una fascinación tan profunda que lo amó en ese instante, se dejó perder en la inmensidad del bosque y en la intensidad de los aullidos de ese hombre-lobo. Por lo que decidió acercarse, quería tocarlo, abrazarlo, besarlo hasta que dejara de aullar tan tristemente.

A pasitos lentos se fue acercando y cuando estuvo a punto de tocarlo él volteó para morderla violentamente, no pudo esquivar la mordida, sin embargo entendió el peligro en el que estaba y comenzó a correr, no sabía en donde tenía la herida, sin embargo su vestido estaba empapado de sangre. Mientras corría podía sentir todo su cuerpo, toda enterita estaba huyendo para salvar su vida, el problema es que estaba perdida, ya no sabía por donde regresar, pero siguió corriendo, él iba detrás de ella y cada que lograba alcanzarla no perdía la oportunidad de lastimarla. Pero algo inesperado pasó, ella cayó en un hoyo recóndito del bosque, se fue hundiendo hasta tocar el fondo completamente rota en pedacitos, como una pieza de cristal que se transforma hasta que no queda ni un ápice de lo que era.

Ha pasado mucho tiempo de eso, cuentan algunos que desde esa noche un espíritu delicado y luminoso se pasea entre los árboles, pero la verdad es que ella encontró otro espacio para vivir y ahora está contenta pues al romperse no solo escapó del hombre-lobo, también descubrió que rota, ya no tiene nada qué perder y sí nuevas formas de caber en la inmensidad de cualquier esfera.
Imagen: David Field
Cuentito dedicado a Noemí Mejorada, la mujer a la que no le importó romperse para encontrarse en otro sitio.



boomp3.com

5 comentarios:

Noemí Mejorada dijo...

Bueno, no se que decir... sólo que me encantó y que me encontré en cada letra... que hermoso post! y sabes que lo digo con toda sinceridad...

Muchas gracias pami! te quiero quiero!

:)

Y bueno, no se si el comentario éste exprese correctamente lo mucho que me gustó, si no, luego déjame que te de yo un abrazooote, a ver si así queda más claro.

:)

Pete...! dijo...

Este cuento me suena a re-invención, a re-nacer. Como quien cae hasta el fondo y conserva el optimismo, sabiendo que ahora no puede haber otra cosa que un ascenso en su vida.
Y si creo estar seguro de la interpretación, felicito a la Rotita por encontrarse en una nueva etapa de su vida, y a Pam por crear tan elocuente analogía, que en palabras de Mimí es fiel a su circunstancia actual.

Congratulaciones a ambas.

user name dijo...

muy interesante el relato..mas alla de que quieras relacionar las palabras y tus ideas con momentos de la vida..creo que el cuento me parece genial..es mas me imagine unas ilustraciones en blanco y negro y una bonita tipografia decorativa acorde a la historia...

y cuando tuviera la historia flotando en mi con las imagenes..me esconderia debajo de las sabanas y tendria sueños sicotropicos

saludos: que estes bien..onde anda que se desaparece

Lilith dijo...

Genial!!! no tengo palabras para describirlo, me he sentido plenamente identificada con este post!, será que en estosmoemntos tambien estoy viviendo una etapa de cambio.

Da mucho miedo, pero uno va descubriendo cosas nuevas y incluso se va reedescubriendo a si mismo.

Feliciades Samy!!

Samantha dijo...

Miles de gracias a todos, he andado muy desconectada, sin embargo con todo mi corazón, gracias.